Es curioso que aún la población en general sigue engañada con respecto a la donación de órganos, puesto que es lo único gratis y limpio de toda una enorme operación donde muchos ganan fortuna con los trasplantes.
Por ésas cosas curiosas, de renovar la licencia de conducir, el funcionario enfrente de mí me pregunta por si deseo ser donador de órganos. Aparte de ser una pregunta inadecuada, puesto que no es muy agradable que se te otorgue la licencia, o renueve, insinuando que nos podemos accidentar y morir, es para mi un abuso de posición puesto que existe con tal proceder una imposición a donar. Por supuesto que mi respuesta fue un no rotundo, viendo de inmediato la cara de sorpresa del funcionario, y luego avancé explicándole lo podrido del sistema, donde figuras públicas hacen campañas a favor de la donación pero no explican que son contratados para ello... Ver más...